La Respuesta es: Sí.
Recientemente Elder Dieter F Uchtdorf compartió esta experiencia en su pagina de Facebook:
A veces las personas dejan comentarios en mis publicaciones de Facebook y tweets preguntando si realmente leo lo que ellas escriben. La respuesta es ¡Sí! Yo leo muchos de sus comentarios. Como dije durante la conferencia general, aunque mis habilidades tecnológicas no se comparan con las de un niño de siete años, para un septuagenario, lo hago bien.
Después de mi discurso en la conferencia, el sábado por la mañana, publiqué un mensaje en Facebook y envié un tweet, en los cuales les pedí que compartieran conmigo las manera en que expresan gratitud por el torrente de luz y verdad que Dios ha derramado sobre ustedes.
Me sentí elevado e inspirado por los comentarios que escribieron.
En Twitter, Jake me dijo que él creó una nueva cuenta en esa red social con el propósito de compartir el Evangelio con los demás.
En Facebook, Sheri contó que lleva un diario personal de gratitud, el cual le ha ayudado a ella y a su familia a mantener la perspectiva y la luz durante momentos de prueba que han ocurrido recientemente.
También en Facebook, Marlo dijo que de manera deliberada se esfuerza por poner de manifiesto su gratitud al demostrar amor a sus hijos pequeños y a su esposo, aun cuando el “hombre natural” en ella le insta a estar enojada, a ser egoísta y a mantenerse ocupada.
Estos son unos pocos de los cientos de mensajes que compartieron conmigo durante ese fin de semana. Estoy muy agradecido por todo lo que hacen para vivir su fe.
Ruego para que cada uno de nosotros continúe reconociendo la abundancia de bendiciones que nuestro Padre Celestial nos ha otorgado y para que permanezcamos comprometidos a expresar nuestra gratitud a Él, que es la fuente de todas nuestras bendiciones.
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