4 Razones por las que Amamos Alimentar a los Misioneros

por Greg Trimble
Algunas personas dan de comer a los misioneros por culpa. Algunos los alimentan porque fueron asignados. Y algunas personas los alimentan porque simplemente les encanta dar de comer a los misioneros.
Aquí hay 4 razones por las que nos encanta alimentar a los misioneros:
1. Cada misionero tiene una mamá que está desesperada por tu ayuda
Hay una madre en algún lugar desesperadamente orando para que algún miembro proporcione un refugio en la tormenta a su misionero. Todo lo que tienes que hacer es imaginar a las madres de estos jóvenes misioneros y tu corazón se hinchará de amor y compasión por ellos. Imagina a tu hijo sirviendo en una ciudad enorme, o en un campo aislado y no querrás nada más que asegurarse de que los misioneros tengan un lugar sólido para descansar los pies y llenar sus vientres.
2. Cuando alimentamos a los misioneros, estamos indirectamente aportando a la obra misional
Una de las experiencias más grandes y memorables de mi vida vino como resultado de las familias de nuestro barrio alimentándonos como misioneros. Era tiempo de Navidad, y mi compañero y yo habíamos golpeado la puerta de un grupo grande de refugiados africanos. Hablaban un inglés entendible y así pudimos aprender mucho sobre sus vidas. Había alrededor de 12-15 de estos refugiados que vivían en un solo apartamento en una parte muy mala de la ciudad. Nos enteramos de que habían escapado recientemente del país de Sierra Leona para llegar a los Estados Unidos tras el conflicto de diamantes de sangre y la guerra civil de 10 años de duración. Su líder, Gibril, se interesó en nosotros y quiso aprender más sobre el evangelio restaurado de Jesucristo.
En la noche de Acción de Gracias, los miembros del barrio nos habían agendado 3 veces. Eso significó que tuvimos que asistir a tres citas de cena con los miembros. Esa noche los miembros también intentaron enviarnos a casa con mucha comida extra. Había tanta comida y conocíamos a las personas que realmente podían beneficiarse de ella. Gibril ... y sus refugiados. Estábamos cargados con un banquete de Acción de Gracias entero y por alrededor de 8:30 p.m. llegamos al apartamento de Gibril. Llamamos a la puerta con las manos llenas. Cuando les dimos la comida, comenzaron a mirarla con asombro. La olieron y la miraron fijamente. Era evidente que nunca habían visto o probado este tipo de comida. Nunca olvidaré la mirada en sus rostros mientras comían esa comida. Nos fuimos al coche y nunca me había sentido tan feliz en mi vida. Mi compañero y yo nos sentamos allí en silencio mientras contemplábamos lo que acabábamos de hacer por estas personas. Pero realmente ... acabamos de entregar la comida. Fueron los miembros quienes nos lo dieron que hicieron todo posible.


3. Ellos Elevan Nuestros Espíritus
Puedes notar la diferencia cuando los misioneros entran en tu hogar. Ya sean nuevos o a poco tiempo de volver a casa, parecen traer un poder con ellos que es notable. Por lo general siempre traen un mensaje con ellos también. Para algunas familias, puede ser uno de los únicos mensajes del evangelio que se comparten durante una semana o un mes determinado. A veces podemos estar ocupados o perezosos en las noches de hogar y en el estudio del Evangelio ... y estos misioneros parecen venir y encender esa llama del estudio del Evangelio.
4. Son grandes ejemplos a seguir para los niños
Mira a todas las personas en el mundo que están luchando por la atención de tus hijos. En la radio, en la escuela, en las películas, y casi en cualquier otro lugar que vayas, hay alguien gritando para que tus hijos vayan y los idolatran.
Pero gracias a nuestro Padre Celestial tenemos a los misioneros. Algunas de las últimas personas que quedan en esta tierra que están dispuestas a sacrificar las cosas terrenales por cosas espirituales. Si nuestros niños se acostumbran a ver a estos jóvenes élderes, y hermanas haciendo la obra del Señor y siendo buenos ejemplos ... entonces tal vez se convertirán en modelos a seguir para que nuestros hijos.
Estas son sólo algunas de las razones por las que amamos alimentar a los misioneros. Estoy seguro que hay muchas más. Alimentamos a los misioneros físicamente ... y ellos alimentan al mundo espiritualmente. Suena como un buen trueque para mí.



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Hernán Felipe Toledo

MBA, Ingeniero, viajero, creador de comunidades y amante de difundir inspiración. Actualmente sirve en la Presidencia de Estaca.

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  1. Mi hogar ha sido muy bendecido al compartir nuestros alimentos y nuestras noches de hogar con las y los misioneros. Desde aquellas hermosas y nobles jovencitas que lograron enseñarnos las primeras lecciones del evangelio y que ayudaron en nuestra conversión hasta ahora los atentos jóvenes misioneros que nos comparten una breve e interesante lección de las escrituras. Gracias.

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  2. Los atiendo porque sé que son enviados de Jesucristo y para mí es un honor tenerlos en mi sencillo hogar ,que ellos llaman hermoso y a la comida deliciosa ! Serví con amor una misión y tengo dos hijos pequeños ,ellos son otra enorme razón para gozar de esa bendición!Amo el Evangelio y la obra misional es parte de mi vida !

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  3. También entregan felicidad y son un ejemplo de humildad, en resúmen, nos dan esperanza de un mundo mejor gracias a nuestro Señor Jesucristo👼🏼🙏🏻

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  4. Cada vez que alimento a los misioneros resivo muchas bendiciones a parte tube la oportunidad de ser alimentada tambien durante mi tiempo misional..y eaa mismas bendicion la esta recibiendo mi hijo hoy en dia en su mision.dar de comer a los angeles del señor en estos dias es la mejor desicion que puede una personas tomar.. Bendiciones a todas a quellas personas que no le pesa el pulso para dar de comer a nuestros hijos

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  5. Sin duda somos bendecidos cuando compartimos nuestra mesa

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  6. Este mensaje me hizo llorar, xq realmente siento que dar de comer a los misioneros es una carga más, pero pude sentir que no es así, es una bendición y debo organizarme para que sea eso una bendición para mi y mi familia, y pensar en esas madres que como yo, mandan a sus hijos y esperan que alguien cuide de ellos, como un día cuidaron del mío, de mi esposo y algún día cuiden de mis nietos.

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  7. Tengo dos años de ser miembro.
    Y desde que conoci a los elderes les doy almuerzo todos los domingos. Es ya tradicion, y siempre que hay cambios es triste pero el que llega se convierte en otro hijo. Amo la mision.

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  8. Tenemos como 4 o 5 años alimentando a los musioneros todos los jueves...amo cada vez q llegan por q iluminan mi casa y son un ejemplo para mi hijo.

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  9. Me encanta darle de comer a los y las misioneras aqui en mi barrio hay 4 y les doy a los 4 con mucho gusto llenan mi hogar de bendiciones quisiera poder darles de comer diario todos los que han pasado por aqui estan en mi corazon

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  10. Hace 27 años de miembro que tengo para mi es una bendicion dar de alimentar a los angeles de dios...asi como me alimentaron de mi en mi tiempo que servi en la mision tambien alimentaron de mi hijo ...alimentaran amis nietos...por eso es para mi una bendicion dar de compartir mis alimentos a los Elderes...se que sus madres estan orando siempre para que a ellos nos les falte los alimentos amo dar de comer a los misioneros...gracias a ellos nunca escasea los alimentos en casa.. siempre hay de abundancia...ellos iluminan mi hogar con luz y verdad

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  11. He conocido la Iglesia a la edad de 12 años y mis mejores momentos en familia han sido cuando ellos llegaban a casa y uno podía sentir su espíritu. Mi mama mamá siempre decía en algún momento mis hijos van a servir en una misión y se q habrá flías q les darán de sus alimentos...y así fue mis hermanos y yo servimos una misión y Jamás nos faltó comida. He sido bendecida y ahora siendo madre se q mi hija en algún momento servirá una misión.q grande bendición.

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