El élder Jeffrey R. Holland, del Quórum de los Doce Apóstoles, fue dado de alta del hospital, según un comunicado de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días el viernes 19 de junio.
“Está volviendo a las actividades normales. Él y su familia aprecian las oraciones y la preocupación en su nombre", dijo el portavoz de la Iglesia Eric Hawkins.
El élder Holland ingresó en el hospital la semana pasada después de varios días de enfermedad, informó la Iglesia el miércoles. "Ha sido testeado y no tiene COVID-19", dijo Hawkins en la declaración anterior. "Se están realizando otros estudios de diagnóstico".
El élder Holland, de 79 años, fue ordenado miembro del Quórum de los Doce Apóstoles el 23 de junio de 1994. Se desempeñaba como segundo consejero en la presidencia del Área Oeste de América del Norte en el momento de su llamado.
Desde 1980 hasta su llamado al Primer Quórum de los Setenta en 1989, el élder Holland fue el noveno presidente de la Universidad Brigham Young en Provo, Utah. Mientras era presidente de BYU, ayudó a establecer el Centro BYU de Jerusalén para Estudios del Cercano Oriente. Anteriormente se desempeñó como comisionado de educación de la Iglesia y decano del Colegio de Educación Religiosa de BYU.
El élder Holland fue entrevistado recientemente por el Elijah Interfaith Institute sobre lo que aprendió durante la pandemia de COVID-19. Se enfocó en la importancia de tomarse un tiempo para la reflexión personal y en cómo está decidido a regresar al servicio público con "un poco más de simpatía y empatía, un poco más de comprensión y sentimiento para los que están en tal congregación".
Unas semanas después de que los líderes de la Iglesia suspendieran las reuniones, cerraran los templos y transportaran a miles de misioneros a sus países de origen en marzo debido a la pandemia, el élder Holland habló con Church News sobre el uso de la pandemia como una oportunidad para el examen de conciencia y el autoexamen.
A medida que millones de personas en todo el mundo se han enfrentado a órdenes de "refugio en el lugar", el élder Holland señaló que el término tiene implicaciones tanto espirituales como físicas. Haciendo referencia al Salmo 61: 1-4, dijo: "El Señor es nuestro refugio final".
“Él es nuestra torre. Nos saca de las aguas turbulentas y nos coloca en la roca de nuestro Redentor. Nos cubre con sus alas, poéticamente hablando".
Aprovechamos de poner un Mensaje pasado de sólo 4 minutos del Élder Holland, ampliamente conocido por su profundidad al entregar esperanza en tiempos de dificultad:
Fuente: CHurchNews
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