Tal como lo expresó "El Diario": "Con la fe en Dios, humildad y perseverancia, la marchista atlética de La Paz, Stephanie Eunice Chávez, clasificó al Campeonato Mundial U20, que se llevará a cabo una vez finalizado los Juegos Olímpicos de Tokio 2021 del 17 al 22 de agosto en Nairobi, Kenia."
Stephanie, de 18 años, ha tenido grandes logros en el pasado, y lamentablemente a pesar de ello, ha tenido dificultades en conseguir apoyo económico para avanzar en su carrera.
Compite desde los 13 años, pero su pasión nació a los 9, en una carrera organizada por una casa radial. A los 13 compitió en una carrera regional, donde sacó el tercer puesto en su categoría, cuyo trayecto era de 4 kilómetros.
“Elegí la marcha porque mi mamá me lo recomendó... Mi primer campeonato fue justo luego de tres meses, ahí salí tercera en el evento nacional U-15 en Beni”, comentó la deportista en contacto con FEM, de Deportes El Diario. El entusiasmo puede llevarte lejos, pero siempre lo económico dependerá para que logres tus objetivos, acotó. “Para mí, todos los viajes fueron cubiertos por mi familia, en ningún momento recibí ayuda de la Federación”, cuenta.
Stephanie tuvo éxito en 2017, cuando en la Copa Internacional sacó la medalla de oro; luego obtuvo la clasificación a los Juegos Olímpicos de la Juventud, siendo una de las cinco mejores de América. Sacó bronce en el Sudamericano de Lima en 2020.
También logró el quinto lugar en los 10.000 metros en Lima, con un tiempo de 49:29.99 suficiente para ratificar la Marca Mínima exigida por World Athletics (50:30.00) y poder asistir al Campeonato Mundial U20.
La falta de apoyo mermó su participación en el último Panamericano en Ecuador, porque no pudo alcanzar los 1000 dólares de pasaje.
“Ahora, hace unos minutos, me dijeron que aún no tengo el pasaje al mundial de Kenia. Recién sabremos hasta el lunes. Esto desmotiva al deportista, pero todo lo hacemos con amor al país”, cuenta.
No obstante, ella quiere “dejar huella”, por amor a su país y hará los esfuerzos para asistir a la cita mundialista. Empero, deberá prepararse bastante, así cuenta su día a día:
“Mi día comienza a las 6 de la mañana. Desayuno, entreno, después me cocino porque mi mamá trabaja a tiempo completo. Yo valoro mucho lo que mi mamá hace. Me gusta leer. En la noche tengo la universidad, estudio ingeniería de sistemas hasta las 10 pm. Es la rutina de lunes a sábado”, relató. Stephanie considera que “en Bolivia hay talento. Lo que me motiva también es superarme cada día más. Mi meta es que la juventud y niñez vea que a pesar de que no tengo muchas cosas, ellos vean que puedo hacerlo. Soy una motivación. Tengo que ser una mejor persona. Me siento feliz de lo que hago. Quiero dejar una huella”.
TEJER PARA GANAR MÁS INGRESOS
Stephanie Chávez contó que para sumar más ingresos tiene un emprendimiento junto a su madre, a quien ayuda. “Mi mamá sabe tejer, implica mucho la vista, las manos, entonces mayormente le ayudo a tejer, elaboramos chompas y gorros para bebes”, contó.
“La dificultad que más veo es el dinero, es un mal necesario, eso limita muchas cosas, a veces no voy a fisioterapia, además que no te alimentas bien. Prefieres ir caminando que tomar movilidades”, manifestó.
Stephanie es creyente en Dios, va a la La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, en su zona en la avenida Buenos Aires. Convive con niños, quienes admiran su desempeño de atleta.
Fuente: ElDiario.net
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