Un grupo de mujeres jóvenes se reunieron alrededor de Erin Norton, una mujer de 35 años con discapacidades, para mostrar su amor obteniendo la Medalla de Jóven Virtuosa SUD en su nombre.
Ella recibió el medallón el miércoles en una ceremonia de premiación en Sandy.
Cada niña participó al pasar 10 horas en un proyecto personalizado según los intereses de Norton.
"La idea surgió cuando enseñé a los laureles una lección sobre el servicio, como hace un año", dijo Schonie Erickson, la consejera anterior de Laureles en el barrio Pinecrest LDS. "Siempre me han llegado al corazón las personas con discapacidad. Tengo unos cuantos amigos con discapacidades pero nunca había oído hablar de algo como esto."
A Erickson se le ocurrió la idea cuando vio el video “For Madison” en lds.org con un grupo de chicas que ganaron el Medallón de Jóven Virtuosa en nombre de una chica de su grupo que tenía autismo severo.
"Una vez que comencé la planificación, obtuvimos la aprobación dentro de dos semanas. Presentamos la idea a las chicas y ni siquiera vacilaron, estaban tan emocionadas de hacerlo", dijo Erickson. "Fue increíble porque al principio no sabían cómo actuar alrededor de Erin, así que fue genial verlas emocionadas por estar involucradas en el proyecto. Algunas chicas ya habían terminado su Progreso Personal, pero otras estaban en progreso o ni siquiera habían comenzado".
Erin tiene parálisis cerebral y depende en gran medida de su madre para obtener ayuda.
"Ella depende totalmente de su mamá. Ella no puede caminar por lo que está en una silla de ruedas. Puede decir pequeñas palabras, puede decir 'quiero música' y 'tengo hambre'. Una de las chicas, Chelsea, comenzó a trabajar para la madre de Erin, cuidando de ella mientras que Deb va a trabajar", dijo Erickson. "Ella es una de esas chicas tímidas, por lo que ha sido genial para ella".
A lo largo del proceso de involucrarse en los proyectos para servir a Erin, las chicas se han vuelto cada vez más cercanas alrededor de Erin.
"Ahora la abrazan y vi a una chica el miércoles por la noche darle un beso en la mejilla. Las chicas toman la mano de Erin y hablan con ella, es muy dulce ", dijo Erickson.
Erin asiste regularmente a las reuniones de su iglesia, pero se perdió la oportunidad de asistir a una clase diaria del Evangelio llamada Seminario dirigida a los estudiantes de secundaria, cuando era una adolescente. A pesar de la diferencia de edad, Erin ha sido aprobada para asistir al Seminario además de participar de la Mutual, una actividad semanal de mujeres jóvenes en la iglesia.
Una joven, Beth se enteró del amor de Erin por la música y planeó una fiesta bailable para una actividad de mutual.
"Beth siempre ha estado más en el lado tímido y ella está en medio de su Progreso Personal. Su proyecto era hacer una fiesta bailable, así que habló con Erin y su madre para averiguar cuáles son las canciones favoritas de Erin. Ella organizó una fiesta de baile para una de nuestras mutuales", dijo Erickson. "Erin eligió tres canciones; Beth bailó con ella una de ellas y Erin se levantó de su silla y bailó y consiguió que su madre se levantara y bailara con ella. Fue muy divertido verla interactuar con ella. Sólo verla animarse así fue increíble".
Mientras que las chicas completaron estos proyectos de 10 horas, continuaron trabajando en sus propios objetivos para completar sus propios proyectos.
"Algunos de los proyectos eran sencillos pero se aseguraron de hacerlo personalmente para Erin. Cada chica hizo algo para que Erin lo llevara a casa. Queríamos hacerlo así para que fuera un recordatorio, para que ella se sintiera parte de ello. Eso es lo que las chicas querían darle ", dijo Erickson. "Armaron un libro de recuerdos, donde explicaron el valor en el que se centraron, lo que aprendieron, lo que hicieron para su proyecto, e incluyeron su testimonio para que Erin pudiera leerlo".
Monique dibujó una imagen, Stephanie hizo una manta, Chelsea está haciendo unas baquetas, Olivia está haciendo un libro de cocina de las recetas favoritas de la familia, Kendyl le hizo a Erin una bufanda, y tres chicas, Lizzy, Sabrina y Ally leyeron el Libro de Mormón en nombre de Erin.
La ceremonia de entrega de premios el miércoles por la noche fue muy concurrida y fue de acuerdo al plan.
"Todos los padres estaban allí, el obispo estaba allí y la hermana Denise Lindberg, de la mesa General de Mujeres Jóvenes, asistió como nuestra invitada sorpresa", dijo Erickson. "La noche entera fue sólo para Erin - yo no podía dejar de llorar, era tan especial."
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Fuente: KSL
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El Señor da a cada uno de sus hijos la oportunidad de desarrollar dones espirituales, si esta joven con discapacidad pudo lograr su meta, ¿por qué no podemos lograrlas los que no padecemos de este tipo de limitaciones?
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