Según informó la Iglesia en sus medios, setenta misioneros (70) de tiempo completo de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días están a salvo luego de un incidente grave durante una conferencia de zona el viernes 12 de noviembre en Torreón, México.
Durante la conferencia multizona en un centro de reuniones local, dos hombres entraron armados con armas y exigieron teléfonos celulares, tabletas y billeteras, dijo el portavoz de la Iglesia, Sam Penrod, en un comunicado emitido esa misma noche.
Los ladrones intimidaron a las 13 hermanas y 57 élderes, con algunos golpes o patadas durante el incidente. El presidente de la misión y su compañera, el presidente Alfredo Zanudo y la hermana Guadalupe Zanudo, también fueron agredidos y amenazados con un cuchillo, dijo Penrod.
Después de que los hombres huyeron del lugar, se llamó a la policía local y nadie necesitó atención médica adicional.
Un consejero de la Iglesia viaja desde la Ciudad de México para ayudar con las necesidades emocionales, y se están poniendo a disposición otras opciones de asesoramiento. La Iglesia se está comunicando con los padres de los misioneros, y se anima a los misioneros a que se comuniquen con sus familias.
Los misioneros han sido retirados del área donde ocurrió el incidente, y todos han recibido instrucciones de ser más cautelosos, dijo Penrod, y agregó que una oficina de seguridad de la Iglesia está en Torreón para evaluar la situación.
“Nuestras oraciones están con estos misioneros y sus familias mientras se recuperan de esta aterradora y traumática experiencia”.
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Fuente: ChurchNews
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