La Primera Presidencia de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días pide a todos los participantes y obreros del templo que usen mascarillas en todo momento en el templo. Los líderes también reiteraron su exhortación para que los miembros de la Iglesia se vacunen contra el COVID-19.
La directiva llegó en una carta enviada el miércoles, 22 de septiembre de 2021 a los líderes de la Iglesia de todo el mundo, también reconoció que las Primeras Presidencias anteriores compartieron mensajes similares en 1900 sobre la viruela y en 1957 sobre la polio.
En la declaración del miércoles, la Primera Presidencia — el presidente Russell M. Nelson y sus consejeros, el presidente Dallin H. Oaks y el presidente Henry B. Eyring — expresaron gratitud porque se ha reanudado de alguna manera, la obra de ordenanzas en todos los templos, con los más recientes haciéndolo en los últimos meses.
“Nuestro deseo es mantener los templos abiertos”, escribieron, y agregaron que a medida que aumentan los casos de COVID-19 en muchas áreas, quieren hacer “todo lo posible” para permitir que los templos permanezcan abiertos.
“Por lo tanto, con efecto inmediato, se pide a todos los participantes y obreros del templo que usen mascarillas en todo momento mientras estén en el templo. Estos protocolos de seguridad son temporales, se basan en las condiciones de COVID-19 y serán rescindidos tan pronto como las circunstancias lo permitan”.
La carta concluye con “No es la primera vez que exhortamos a los miembros de la Iglesia a vacunarse y a protegerse a sí mismos y a los demás de la propagación de enfermedades…. Por favor, haga todo lo que pueda para protegerse y proteger a los demás para que la obra del Señor pueda avanzar en ambos lados del velo».
Con respecto a declaraciones anteriores de Primera Presidencias sobre enfermedades y vacunas, Lorenzo Snow, entonces presidente de la Iglesia, y George Q. Cannon, su primer consejero en la Primera Presidencia, compartieron un mensaje publicado el 17 de noviembre de 1900 en el Deseret Evening News sobre la epidemia de viruela en ese entonces.
“Aprovechamos esta oportunidad para sugerir [a los santos] … que empleen todas las precauciones para evitar la propagación del contagio”, escribieron.
Posteriormente, agregaron: “A la cuestión de la vacunación le hemos dado una cuidadosa reflexión y consideración [.]… Somos conscientes de que existe una diferencia de opinión en la comunidad en cuanto a los méritos de esta cuestión; y … nos hemos sentido reacios a expresarnos públicamente al respecto. Ahora, sin embargo, sentimos que … sugerir y recomendar que la gente en general aproveche la oportunidad de vacunarse [.]”
Seis décadas después, con el mundo luchando contra la enfermedad de la poliomielitis, la Primera Presidencia respalda la campaña de recaudación de fondos de la Fundación Nacional para la Parálisis Infantil. En la misma declaración, publicada el 30 de enero de 1957 en el Deseret News, David O. McKay y sus consejeros, Stephen L. Richards y J. Reuben Clark, exhortaron a los Santos de los Últimos Días a vacunarse contra la polio.
“Estamos agradecidos de que haya seguridad y esperanza en la perspectiva de protección universal con la vacunación. Felicitamos a todos nuestros ciudadanos, en particular a las mujeres, que están dando tan generosamente su tiempo y esfuerzo en apoyo de la campaña.
“No dudamos en exhortar a todos los miembros de la Iglesia y otros ciudadanos a que apoyen la campaña que se está llevando a cabo, dando tan generosamente como cada uno pueda y asegurándose de que todos los miembros de la familia, a menos que estén exentos por orden del médico, reciban la vacuna”.
La carta del 22 de septiembre en su totalidad dice:
Estimados hermanos y hermanas:
Estamos agradecidos de que en los últimos meses se haya reanudado cierto nivel en la obra de ordenanzas de todos los templos. Nuestro deseo es mantener los templos abiertos.
A medida que aumentan los casos del COVID-19 en muchas regiones, deseamos hacer todo lo posible para permitir que los templos permanezcan abiertos. Por lo tanto, con carácter inmediato, se pide a todos los participantes y obreros del templo que usen mascarillas en todo momento mientras estén en el templo. Estos protocolos de seguridad son temporales, tomando como base las condiciones del COVID-19, y serán revocados tan pronto como las circunstancias lo permitan.
El que instemos a los miembros de la Iglesia a que se vacunen y se protejan a sí mismos y a los demás de la propagación de la enfermedad tiene un precedente. Anteriores Primeras Presidencias compartieron mensajes similares en 1900 acerca de la viruela y en 1957 con relación a la polio. Les suplicamos que hagan todo lo posible por protegerse a ustedes mismos y a los demás para que la obra del Señor en ambos lados del velo pueda seguir adelante.
Atentamente,
Russell M. Nelson
Dallin H. Oaks
Henry B. Eyring
La Primera Presidencia
Fuente: ChurchNews
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Gracias a mi Padre Celestial porqué ya está pasando está pandemia. Y a nuestro presidente Russell M Nelson por su preocupación por nosotros.
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